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- No hables de tu ex.
Los hombres detestan cuando las mujeres se ponen a hablar de su ex. No le cuentes porqué cortaron, como era su relación, etc. Si te pregunta, lo mejor es dar respuestas evasivas y generales que no digan nada. Mientras menos información mejor.
- No te acuestes con él (durante el tiempo más largo que puedas).
Los hombres son muy competitivos, quieren trepar el Aconcagua, quieren ser el mejor deportista, el más exitoso, etc. Quieren llegar a dónde otros hombres no llegan. Eso los hace sentir bien y es una caricia para su ego. -Tengo un amigo que le encanta contar la historia de todo el esfuerzo que le costó lograr que su novia le aceptara una salida con él.- Es típico de ellos disfrutar de la conquista! El tema es que si logran que una mujer se acueste con ellos enseguida y sin invertir demasiado esfuerzo, no la valoran demasiado. Primero se dicen a sí mismos: ¡no pudo resistirse a mis encantos! Pero enseguida empiezan a preguntarse ¿A cuántos otros hombres no se habrá podido resistir? Entonces ya no piensan que seas demasiado especial (Hay algunas excepciones.) Muchas veces a partir de ahí mismo, empiezan a decaer las invitaciones a cenar, los mensajitos y demás cositas que nos gustan. ¿Es machista esto? Sí, lamentablemente. No es algo que me guste, ni tengo la receta para cambiar el mundo, pero definitivamente esto les va a resultar útil para mantenerse en una postura de calma y poder en sus relaciones. Mientras no te acuestes con él, si le gustás, él no va a poder pensar claramente. Vas a estar en su cabeza y en sus pensamientos. Mientras tanto, podés tomarte el tiempo de observar quien es y cómo se comporta. Además, es mejor que te enteres que está casado o que es un mentiroso compulsivo antes de acostarte con él.
- No vayas a su casa
Si te propone ir a su casa, porque se ofrece “a cocinar”, o si te invita a ver una peli, prendé la guardia enseguida. Obviamente quiere sexo, y lo más conveniente es que le digas algo como “me incomoda ir a tu casa” o “no te conozco, prefiero no ir a tu casa”; ¿Qué otra cosa podemos hacer?. Si lo único que te ofrece hacer es eso, entonces proponele “dejarlo para otro momento” o decile “no te preocupes, ya nos veremos otro día”. Es importante que puedas elegir y que no se te imponga un plan. Vos decidís cuando vas a su casa y no él. My way or the highway. Esta es una norma general y muy importante, si no te trata como te gusta o no te sentís valorada, simplemente mostrale que no tenés ningún problema en no verlo de nuevo.
- No salgas incómoda o demasiado arreglada
Es importante que él no piense que estás haciendo un esfuerzo exagerado por gustarle. Porque puede pensar que estás desesperada. Él ya te invitó a salir, le gustaste, ahora la manera de atraerlo hacia vos es sonreír, ser buena compañía y no esforzarte demasiado por gustarle. Esto genera cierto misterio “¿Qué tendrá esta chica que es tan natural y relajada?” Así que si hace frío no salgas desabrigada, no te pongas unos tacos incómodos ni un jean demasiado ajustado. No muestres demasiados atributos, sólo un atributo a la vez. Es decir: o piernas, o escote, o espalda descubierta. Mostrar un atributo es una señal de que la sensualidad es parte de vos. Mostrar demasiado es una señal de “Mirame por favor” y es menos interesante. Recordemos la frase de Sofía Loren: “Sex appeal es 50% lo que tenés y 50% lo que las personas creen que tenés.” Dejemos lugar a la imaginación.
- No señales tus defectos
Es importantísimo que muestres una actitud de seguridad con vos misma, con tu cuerpo y con tu belleza natural. Por eso nunca señales tus defectos ni digas cosas como “tengo que bajar unos kilos”, “voy a empezar el gimnasio para llegar al verano” “yo era muy linda a los 20 años”, “no me gusta mi nariz”, etc.
- No compitas con otras mujeres
Cuando competimos con otras mujeres nos mostramos inseguras y esto enseguida nos resta puntos. Así que si alguien dice que otra mujer es hermosa, nunca lo contradigas, ni digas que es fea. Ni le busques defectos- No des bola a esos comentarios. Si vas a comentar, podés decir “Sí, muy linda”. Es importante que muestres que estás muy tranquila con vos misma y que no te sentís amenazada por otras mujeres.
- No hagas reclamos ni te quejes
A veces los hombres hacen cosas que no nos gustan. Nos dicen que nos van a llamar para ir a cenar y luego no lo hacen, nos dejan esperando, llegan tarde, etc. Lo importante es no dar demasiada bola. Si te dice que se verán para cenar el sábado a la noche y son las 8 y no te confirmó, hacé otro plan con amigas. Nunca hagas reclamos porque le das una sensación de seguridad: él se da cuenta que estás pendiente de él y eso hace bajar el deseo. Además, ellos detestan los reclamos. En cambio si actuás como si nada hubiera pasado, les agarra la inseguridad de que no los extrañes, de que no estás muy pendiente. Si él realmente se comporta de una manera desubicada o no te gustan sus actitudes podés simplemente dejar de contestarle los mensajes o no atenderle el teléfono. Los hombres no responden a las palabras, ellos responden efectivamente cuando NOS DISTANCIAMOS o CORTAMOS EL CONTACTO. Esta es la regla de oro de la comunicación con los hombres.
- No cuentes tus dramas personales
Las primeras salidas son un momento para reírse, divertirse, mirarse, jugar. No es un momento para contar todos tus dramas familiares. Es probable que lo espantes y su vínculo es muy superficial para que verdaderamente le importe tu historia, tu pasado, etc.
- No hables demasiado
Es mejor que hagas preguntas, escuches algo de su vida y hables un poco de tus intereses, tus pasiones. Si hay silencios, sentite cómoda con ellos. No vas a impresionar a nadie hablando horas sobre vos misma, sino que él se va a sentir aturdido e incapaz de contarte de la suya.
- No le digas que estás buscando una relación seria
Nuevamente, el misterio es importante. Los hombres suelen pensar que todas las mujeres estamos buscando ponernos de novias con el primer chico que nos invita a salir. Nuestra forma de intrigarlos es plantear otro juego. Tus acciones y palabras deben mostrar el siguiente mensaje: “No estoy buscando ponerme de novia, no te conozco demasiado así que no sé qué quiero con vos”. No estamos apuradas y será su tarea convencernos de lo contrario
Anita S.