vivir es arriesgar

Todos hemos pasado por muy malos momentos pero lo importante es que estamos de pie y por eso es que te digo que te arriesgues a enamorarte, a vivir de nuevo las cosas bellas que implican estar en un círculo amoroso y apasionado.
Claro que ahora eres más maduro, sabes lo que quieres y lo qué no, pero ¿Qué impide que te vuelvas a enamorar? ¿Las caídas, los golpes, las tristezas que te provocaron las relaciones anteriores? ¿Y qué pasa con las cosas lindas y vibrantes que nos hace sentir el amor? ¿Dónde las dejas?

Lo que pasó, pasó, dice el dicho, así que no vivas del pasado, deja atrás todo eso y arriésgate a algo nuevo, a algo nunca antes vivido. Deja de ver las cosas malas como perturbadoras y mejor velas como una experiencia de vida.

Si no estás con la persona que creías “el amor de tu vida” es por una simple razón: alguien mejor te está esperando, alguien que te merece y que tú lo mereces.

No vas a conocer el amor si te quedas encerrada en ese baúl de lamentos y resentimientos. Si en el pasado sufriste, ahora más que nunca es el momento de que seas feliz y que conozcas el lado positivo del ya mencionado amor.

Tírate, lánzate y arriésgate que esa es la magia del amor. Una magia que no es predecible, que no es contable ni tangible. La vida se trata de eso, de no conocer lo que pasará mañana o lo que sucederá en unos años. Esa es la gracia, el motivo de vida y que cualquier día podría ser un buen día.

Los miedosos y los que prefieren prevenir antes que lamentar, son los que se quedan solos y los que nunca vivirán una aventura extrema y divertida. Recuerda que es mejor haber caído y amado que nunca haber conocido el significado real y extenso de la palabra amor.

No te quedes en tu alcoba lamentándote por lo que pasó. No le niegues tu amor a alguien que puede venir con las mejores intenciones. No dudes ni por un solo momento de lo que vales y arriésgate, que la vida es para los que no le temen a nada. ¡Arriésgate a enamorarte, no lo dudes más!